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Loperamida,oxido

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Acción y mecanismo

Antidiarréico con una elevada selectividad por el intestino. En éste se convierte gradualmente en loperamida. En los pacientes con diarrea mejora la absorción neta de fluidos y de electrolitos, así como la absorción de bilis por una acción directa local sobre la mucosa del intestino. Reduce la producción diaria estomal y disminuye la pérdida de fluidos y de electrolitos en pacientes con estoma. Contrarresta también el hiperperistaltismo intestinal actuando sobre los músculos circulares y longitudinales de la pared intestinal. En pacientes con un tránsito rápido, la repetida administración retarda el tránsito del contenido intestinal por el intestino delgado y el grueso. No presenta ningún efecto de tolerancia ni dependencia como ocurre con opiáceos similares.

Farmacocinética

– Vía oral: se convierte lentamente en loperamida, predominantemente mediante la reducción anaeróbica por la flora intestinal y por las células epiteliales del intestino. Se absorbe menos del 20%. Los niveles de plasma son máximos a las 0,5 a 1 hora, disminuyendo con una vida media de 1 hora. La mayor parte pasa al intestino delgado distal y al intestino grueso, en donde el profármaco se convierte gradualmente en loperamida. La absorción de loperamida así formada es más lenta y menos extensa que la absorción de una dosis idéntica de loperamida administrada por vía oral. Los niveles máximos de loperamida se obtienen de 5 a 8 horas. La vida media terminal de la loperamida es de aproximadamente 20 horas. La biodisponibilidad relativa de loperamida es la mitad que la observada tras la administración de loperamida.
Los pacientes con ileostomía retienen la capacidad de reducir el óxido loperamida. La loperamida generada después de la reducción del óxido de loperamida por el contenido del intestino se excreta parcialmente en las heces. Las propiedades cinéticas son lineales dentro de una gama de dosificación de 1 a 16 mg. La unión a proteínas plasmáticas del óxido de loperamida y de la loperamida es del 77,4 % y del 95,5 % respectivamente. El óxido de loperamida y la loperamida se eliminan predominantemente por el metabolismo. La N-desmetilación oxidativa de la loperamida es la vía más importante. Ni el óxido de loperamida ni el metabolito activo loperamida son excretados por la orina. En realidad el óxido de loperamida ejerce su efecto antidiarréico por una acción local sobre el intestino; además, la cantidad de loperamida que llega al hígado después de administrar 1 mg de óxido de loperamida es de sólo un cuarto comparada con la observada tras una dosis terapéutica normal de 2 mg de loperamida.

Indicaciones

– Diarrea: control y alivio sintomático de la diarrea. También indicado para ralentizar el vaciamiento gástrico y para mejorar la continencia anorrectal.

Posología

Oral. Adultos y niños mayores de 12 años:
– Diarrea aguda: inicialmente 2 mg (2 comprimidos) seguida de 1 mg (1 comprimido) después de cada deposición diarreica. No debe tomarse ningún comprimido después de una deposición normal o dura. Se recomienda no exceder de una dosis diaria de 8 mg (8 comprimidos).
– Diarrea crónica: inicialmente 2 mg (2 comprimidos) seguido de 1 mg (1 comprimido) después de cada deposición diarreica, hasta controlar la diarrea. Sólo en casos excepcionales podrá excederse de 8 mg/24h. A partir de entonces debe reducirse la dosis para satisfacer los requisitos individuales. Los ensayos clínicos llevados a cabo en pacientes con ileostomía y en aquellos con diarrea inducida por radiación demostraron que son efectivas dosis de 3 mg o de 4 mg/12h. En pacientes con enfermedad de Crohn la dosis media diaria necesaria para controlar la diarrea fue de 3 mg. Una vez establecida la dosis diaria óptima, puede administrarse esta cantidad como una sola dosis o dos veces al día. La dosificación clínica media de mantenimiento en ensayos clínicos fue de 3 a 4 mg por día en pacientes con varios tipos de diarrea crónica. Tratándose de diarrea crónica, si no se observa una mejora clínica después de por lo menos una semana, no es probable que los síntomas se lleguen a controlar continuando el tratamiento.

Contraindicaciones

– Hipersensibilidad conocida a uno o más de los componentes de la fórmula o a la loperamida.
– Pacientes con colitis ulcerativa o colitis pseudomembranosa asociada a antibióticos: en quienes debe evitarse la inhibición o peristalsis, una demora del tránsito intestinal o un estreñimiento. Debe interrumpirse inmediatamente cuando se desarrolla estreñimiento, distensión abdominal, íleo y otras manifestaciones adversas.
– Disentería aguda, caracterizada por sangre en las defecaciones y por fiebre: no debe administrarse como terapia primaria.

Precauciones

Precauciones:
– Diarrea: puede tener lugar una depleción de fluidos y de electrolitos. El uso del fármaco no excluye la necesidad de una terapia apropiada de reposición de fluidos y de electrolitos, esencial en tales pacientes.
Ya que el tratamiento de la diarrea con el fármaco es sintomático, éste debe tratarse causalmente siempre que haya una terapia causal. En la diarrea aguda, si no se observa una mejora clínica dentro de 72 horas, debe interrumpirse la administración, debiéndose aconsejar a los pacientes que consulten a su médico.
– Insuficiencia hepática: se carece de experiencia.

Interacciones

Aunque no se ha registrado ninguna interacción, es de esperar que los fármacos con propiedades farmacológicas similares pueden potenciar su efecto, y que aquellos que aceleran el tránsito gastrointestinal pueden disminuir su efecto.

Embarazo

Categoría B de la FDA. No se ha establecido la seguridad de su uso durante el embarazo humano. Aunque los estudios efectuados en animales no han revelado ninguna toxicidad reproductiva a dosis no tóxicas para la madre, debe sopesarse el beneficio terapéutico frente a los riesgos potenciales antes de administrar el fármaco durante el embarazo, especialmente durante el primer trimestre.

Lactancia

Se excreta en cantidades mínimas por la leche materna. Las cantidades ingeridas por el lactante después de la toma oral del medicamento por la madre, son al menos 2000 veces menores que una dosis terapéutica diaria de loperamida de 0,2 mg/kg/día administrada al lactante. Por consiguiente las madres en periodo de lactancia no tienen que interrumpirlo mientras toman el medicamento.

Niños

Se carece de experiencia en niños de menos de 12 años de edad.

Ancianos

No se han realizado estudio específicos en este grupo de edad.

Reacciones adversas

Los efectos secundarios comunicados son similares a los asociados con el síndrome diarréico o con los subsiguientes a él (p. ej. cefalea, estreñimiento, náusea, sequedad de boca, dolor abdominal), siendo generalmente benignos y que cesan espontáneamente. En estudios controlados su incidencia no excedió a la observada en pacientes tratados con placebo.
– Raramente: casos de hipersensibilidad como rash y urticaria.

Sobredosis

– Síntomas: basándose en datos farmacológicos y toxicológicos, puede esperarse que una sobredosis vaya asociada con uno o más de los síntomas siguientes: estreñimiento, íleo y efectos sobre el SNC (estupor, anomalías en la coordinación, somnolencia, miosis, hipertonía muscular, depresión respiratoria). No obstante, considerando la baja absorción y disponibilidad sistémica de la loperamida después de la toma del medicamento, se espera que los efectos por sobredosis no ocurran frecuentemente y que el riesgo de efectos sobre el SNC sea muy bajo.
– Tratamiento: el tratamiento es sintomático y de apoyo. En pacientes que no han vomitado, el lavado gástrico precederá a la administración de carbón activado. Una suspensión de carbón activado suministrada dentro de las 3 horas después de la ingestión del medicamento es probable que reduzca la conversión en loperamida y la absorción.
Si se manifiestan síntomas de sobredosis, puede administrarse naloxona como antídoto. Ya que la duración de la acción de la loperamida es superior a la de la naloxona (1 a 3 horas) está indicado repetir el tratamiento con naloxona. Por consiguiente el paciente debe ser observado atentamente durante por lo menos 48 horas para detectar una posible depresión del sistema nervioso central (SNC). No se espera que sean efectivas ni la diuresis forzada ni la hemodiálisis.

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23 Jun 2009
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