Oxazepam
Acción y mecanismo
Ansiolítico benzodiazepínico de acción corta.
Actúa incrementando la actividad del ácido gamma-aminobutírico
(GABA), un neurotransmisor inhibidor que se encuentra en el
cerebro, al facilitar su unión con el receptor GABAérgico. Posee
actividad hipnótica, anticonvulsivante, sedante, relajante
muscular y amnésica.
Farmacocinética
Vía oral: Su biodisponibilidad es del 90-95%.
Es absorbido rápidamente, Tmax=2-3 h. El grado de unión a proteínas plasmáticas es del 85%. Es metabolizado en el hígado, siendo eliminado mayoritariamente (90%) con la orina, menos del 1% en forma inalterada. Su semivida de eliminación es de 6-20 h.
Indicaciones
– [INSOMNIO]: trastornos en el ritmo del sueño.
– Trastornos cardiovasculares, como estenocardías, taquicardias y extrasistolias de origen funcional.
– Trastornos gastrointestinales, como [GASTRITIS] neurógena, [ANOREXIA NERVIOSA], [DIARREA] y [ESTREÑIMIENTO] de origen nervioso y como terapéutica complementaria en los cuadros de gastritis y ulcus.
– Trastornos respiratorios psicógenos.
– Síndromes vegetativos de la mujer: [DISMENORREA], tensión premenstrual y transtornos del [CLIMATERIO], [NEUROSIS] sexual.
– [EXCITABILIDAD] nerviosa, hiperexcitabilidad, cuadros de agotamiento nervioso, síndrome de sobrecarga (profesional o familiar), [ANSIEDAD] e intranquilidad, incluso ante intervenciones médicas y odontológicas, ansiedad ante determinadas descargas.
Posología
Vía oral:.
– Adultos: dosis usual, 5-20 mg/8-12 h según estado clínico, siendo la dosis media recomendada de 10 mg/8-12 h.
– Niños en edad escolar: mitad de la dosis de adultos.
– Nota: En el tratamiento del insomnio deben evitarse los tratamientos superiores a 2-3 sem, sugiriéndose el uso intermitente del fármaco durante este período.
– Suspensión del tratamiento: en pacientes tratados durante dos o más semanas de forma ininterrumpida, la suspensión del tratamiento deberá realizarse de forma gradual.
Contraindicaciones
– [ALERGIA A BENZODIAZEPINAS].
– [MIASTENIA GRAVE]: la actividad relajante muscular de las benzodiazepinas puede producir un empeoramiento de la enfermedad, con aumento de la fatiga muscular.
– [INSUFICIENCIA RESPIRATORIA] severa: su efecto relajante muscular puede potenciar la depresión respiratoria.
– [GLAUCOMA EN ANGULO ESTRECHO]: el posible efecto anticolinérgico de la benzodiazepina puede aumentar la presión intraocular y agravar la enfermedad.
– [APNEA DEL SUEÑO].
– [INSUFICIENCIA HEPATICA] severa, debido al riesgo asociado de encefalopatía.
– [INTOXICACION ETILICA AGUDA], [COMA] o [SINCOPE]: debido a la depresión aditiva sobre el sistema nervioso central.
Precauciones
– Historial de [DROGODEPENDENCIA]: el uso prolongado o dosis elevadas de benzodiazepinas puede producir dependencia psíquica o física.
– [INSUFICIENCIA RENAL]: dado que se elimina mayoritariamente por vía renal, debe ajustarse la dosis al grado de incapacidad funcional renal.
– [PORFIRIA]: su metabolización hepática puede potenciar la síntesis de determinadas enzimas como la ALA sintetasa, que puede dar lugar a aumento de porfirinas, lo que provoca la exacerbación de la enfermedad.
– [REACCIONES DE FOTOSENSIBILIDAD]: no es recomendable una exposición prolongada al sol ante el riesgo de que puedan producirse manifestaciones de fotosensibilidad.
– Tolerancia: Después de un uso continuado durante algunas semanas, puede detectarse un cierto grado de pérdida de eficacia con respecto a los efectos hipnóticos.
– [DEPENDENCIA]: El tratamiento con benzodiazepinas puede provocar el desarrollo de dependencia física y psíquica. El riesgo de dependencia se incrementa con la dosis y duración del tratamiento y es también mayor en pacientes con antecedentes de consumo de drogas de abuso o alcohol. Una vez que se ha desarrollado la dependencia física, la finalización brusca del tratamiento puede acompañarse de síntomas de retirada, tales como cefaleas, dolores musculares, ansiedad acusada, tensión, intranquilidad, confusión e irritabilidad. En los casos graves, se han descrito los siguientes síntomas: despersonalización, hiperacusia, hormigueo y calambres en las extremidades, intolerancia a la luz, sonidos y contacto físico, alucinaciones o convulsiones.
– Insomnio de rebote y ansiedad: Dado que la probabilidad de aparición de un fenómeno de retirada/rebote es mayor después de finalizar el tratamiento bruscamente, se recomienda disminuir la dosis de forma gradual hasta la supresión definitiva.
– [AMNESIA]: Las benzodiazepinas pueden inducir una amnesia anterógrada. Este hecho ocurre más frecuentemente transcurridas varias horas tras la administración del medicamento, por lo que, para disminuir el riesgo asociado, los pacientes deberían asegurarse de que van a poder dormir de forma ininterrumpida durante 7-8 horas.
– Reacciones psiquiátricas y paradójicas: Las benzodiazepinas pueden producir reacciones tales como, intranquilidad, agitación, irritabilidad, agresividad, delirios, ataques de ira, pesadillas, alucinaciones, psicosis, comportamiento inadecuado y otros efectos adversos sobre la conducta. En caso de que esto ocurriera, se deberá suspender el tratamiento. Estas reacciones son más frecuentes en niños y ancianos.
– [PSICOSIS]: Las benzodiazepinas no están recomendadas para el tratamiento de primera línea de la enfermedad psicótica.
– Ansiedad asociada a [DEPRESION]: Las benzodiazepinas no deben usarse solas para el tratamiento de la ansiedad asociada a depresión, se han observado episodios de manía e hipomanía con riesgo de suicidio.
Interacciones
– Alcohol etílico: hay estudios en los que se ha registrado potenciación de los efectos depresores sobre el sistema nervioso central.
– Fenitoína: hay estudios en los que se ha registrado disminución de los niveles séricos de oxazepam, con posible inhibición de su efecto, por inducción de su metabolismo hepático.
– Heparina: hay algún estudio en el que se ha registrado aumento de la fracción libre plasmática (143%) de oxazepam, con posible potenciación de su efecto, por desplazamiento de su unión a proteinas plasmáticas.
– Levodopa: hay estudios con otras benzodiazepinas (clordiazepóxido, diazepam, nitrazepam) en los que se ha registrado inhibición del efecto antiparkinsoniano por antagonismo de sus mecanismos a nivel colinérgico y dopaminérgico.
– Tabaco: hay algún estudio en el que se ha registrado aumento del aclaramiento de oxazepam, por posible inducción de su metabolismo hepático debido a los hidrocarburos policíclicos presentes en el tabaco, pudiendo ser necesario un ajuste de la posología en fumadores.
– Valproico, ácido: hay algún estudio en el que se ha registrado disminución del aclaramiento, con posible potenciación de su acción y/o toxicidad, por inhibición de su metabolismo hepático.
– Zidovudina: hay algún estudio en el que se ha registrado aumento de la biodisponibilidad de zidovudina, con posible potenciación de su toxicidad, por inhibición de su metabolismo.
Embarazo
Categoría D de la FDA. El oxacepam atraviesa la placenta. No se han realizado estudios adecuados y bien controlados en humanos. Algunos estudios han sugerido un riesgo incrementado de malformaciones congénitas con el uso de benzodiazepinas (clordiazepóxido, diazepam) durante el 1er trimestre. Se ha atribuido síndrome de abstinencia neonatal (temblores e irritabilidad) así como flaccidez neonatal y problemas respiratorios con el uso crónico de benzodiazepinas durante el embarazo. El uso de benzodiacepinas justo antes o durante el parto puede dar lugar a un síndrome en el neonato caracterizado por hipotonía, letargia y dificultades en la lactación. Aunque no parece que el uso ocasional y con dosis moderadas comporte riesgos especiales, rara vez es urgente el uso de benzodiazepinas durante el embarazo, por lo que se debería evitar su uso. La posibilidad de que una mujer en tratamiento pueda quedarse embarazada y de interrumpir el tratamiento en el caso de que se haya producido el embarazo debe considerarse.
Lactancia
Se ignora si el oxacepam se excreta con la leche materna, no obstante, la mayoría de las benzodiazepinas sí se excretan. Los neonatos metabolizan más lentamente las benzodiazepinas, por lo que es posible la acumulación de estos fármacos y sus metabolitos alcanzando niveles tóxicos (sedación, dificultades en la alimentación y pérdida de peso). Se recomienda suspender la lactancia materna o evitar la administración de este medicamento.
Niños
La seguridad y eficacia del uso de oxacepam en niños menores de 6 años no han sido establecidas en este grupo de edad. Los niños, especialmente los más pequeños, son más sensibles a los efectos de las benzodiazepinas sobre el SNC. En el neonato puede producirse una depresión prolongada del SNC debido a la incapacidad para biotransformar las benzodiazepinas en metabolitos inactivos. Uso aceptado en niños mayores de 6 años, recomendándose especial control clínico.
Ancianos
Los pacientes geriátricos pueden mostrar mayor sensibilidad a los efectos adversos de las benzodiazepinas sobre el SNC. Un estudio retrospectivo de control de casos ha mostrado que los ancianos en tratamiento con benzodiazepinas de acción corta tienen menor propensión a sufrir caídas y fracturas que aquellos en tratamientos con benzodiazepinas de acción prolongada. Se recomienda limitar la dosificación a la mínima eficaz y aumentarla gradualmente, si es necesario, para disminuir la posibilidad de desarrollo de ataxia, mareos y sedación excesiva.
Efectos sobre la conducción
Las benzodiazepinas tienden a producir disminución de los reflejos, pequeñas alteraciones de la coordinación psicomotriz y del estado de alerta. Por tanto, los pacientes tratados con estos fármacos deberían evitar en lo posible la conducción de vehículos o el manejo de maquinaria compleja especialmente durante las primeras horas de la mañana si ha tomado el medicamento por la noche (por la somnolencia residual). No tome bebidas alcohólicas.
Reacciones adversas
Los efectos adversos de oxazepam son, en general, frecuentes y moderadamente importantes. El perfil
toxicológico de este fármaco es similar al del resto de benzodiazepinas ansiolíticas. En la mayor parte de los casos, las reacciones adversas son una prolongación de la acción farmacológica y afectan principalmente al sistema nervioso central. El 50% de los pacientes experimenta somnolencia transitoria, durante los primeros días de tratamiento. Raramente los pacientes tratados con este medicamento se ven obligados a
suspender el tratamiento. Las reacciones adversas más características son:
-Muy frecuentemente (>25%): somnolencia y confusión, especialmente en ancianos y debilitados; si persisten estos síntomas se debe reducir la dosis.
Sobredosis
– Síntomas: Al igual que ocurre con otras benzodiazepinas, la sobredosis no representa una amenaza vital a no ser que su administración se combine con otros depresores centrales (incluyendo alcohol). La sobredosificación con benzodiazepinas se manifiesta generalmente por distintos grados de depresión del sistema nervioso central, que pueden ir desde somnolencia hasta coma. En casos moderados, los síntomas incluyen somnolencia, confusión y letargia. En casos más serios, pueden aparecer ataxia, hipotonía, hipotensión, depresión respiratoria, raramente coma y muy raramente muerte.
– Tratamiento: Tener en cuenta la posibilidad de que el paciente haya ingerido múltiples productos. Debe inducirse el vómito (antes de una hora) si el paciente conserva la consciencia o realizarse un lavado gástrico con conservación de la vía aérea si está inconsciente. Si el vaciado gástrico no aporta ninguna ventaja, deberá administrarse carbón activado para reducir la absorción. Deberá prestarse especial atención a las funciones respiratoria y cardiovascular si el paciente requiere ingreso en una unidad de cuidados intensivos.
– Antídoto: Puede usarse el flumazenilo.