Asma Asma infantil
Aproximadamente el 10% de los niños tiene síntomas asmáticos, pero hay lactantes y niños pequeños que pueden no mostrarlos.
En el diagnóstico del asma infantil es importante que el médico considere la historia clínica del paciente y la de sus padres.
Por otra parte, numerosos estudios han demostrado que el riesgo de asma aumenta en los niños con uno o ambos padres fumadores y que los niños de entre dos y cuatro años que viven con una persona que fuma tienen un 28% más de probabilidad de sufrir sibilancias que los niños de familias sin fumadores.
Dependiendo de la causa de la enfermedad, el tratamiento variará según el tipo (asma alérgica o extrínseca, de causa desconocida) y la gravedad (leve, moderada o severa). Es muy importante que el paciente controle la evolución de la enfermedad y colabore con el tratamiento para prevenir las crisis agudas y evitar los síntomas asmáticos.
En la actualidad, con los métodos diagnósticos y los nuevos tratamientos para el asma, los pacientes asmáticos, y en particular los niños, pueden tener una calidad de vida igual a la de cualquier persona sana e, incluso, pueden llegar a curarse.
En este sentido, la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) insiste en que es necesario que los padres de los niños asmáticos sepan que sus hijos pueden realizar actividades deportivas y llevar una vida prácticamente igual a la de los niños sanos. Un niño asmático puede practicar cualquier deporte, a excepción del buceo con bombonas de aire.
Antes de iniciarse en la actividad física y el deporte, siempre debe consultarse con el médico cuál es la medicación idónea personal para evitar una crisis. Sirva como ejemplo que alrededor del 10% de los deportistas que participaron en los Juegos Olímpicos de Barcelona eran asmáticos.
–Prevención en la guardería
Los niños que asisten a la guardería antes de los dos años tienen una mayor prevalencia de asma, según explica el doctor Magnus Wickman, del Centro de Investigación de la Alergia del Instituto Karolinska, en Estocolmo, en una ponencia en el Paediatric Respiratory & Allergy Meeting (PRAM) de Valencia.
El especialista sueco ha confirmado así la denominada hipótesis higienista, que se formuló para explicar el incremento que se viene observando en la prevalencia mundial del asma.
La teoría fue señalada por primera vez por el doctor David Strachan, que señaló que el riesgo de desarrollar enfermedades alérgicas estaba inversamente relacionado con el número de niños existentes en una familia.
Según el doctor Wickman, distintos estudios han demostrado la validez de la hipótesis higienista, que afirma también que los niños que crecen en el campo tienen menos asma alérgica, fiebre del heno y atopia.
Por ello se concluye que el desarrollo actual de enfermedades alérgicas en la niñez podría haber sido fomentado por las mejoras observadas en la salud pública, el hecho de que los núcleos familiares sean más pequeños y que existen mejores estándares vitales.