Menstruación
La menstruación consiste en un flujo mensual de sangre que parte del tracto genital femenino. Cuando la ovulación no ha sido seguida de fecundación, la mucosa uterina, preparada para la anidación de un huevo, se desprende del útero para permitir una nueva ovulación.
Esta hemorragia desaparece, de forma temporal, durante la gestación y definitivamente, en la menopausia.
Trastornos más frecuentes
- Amenorrea: ausencia de menstruación fuera del embarazo.
- Amenorrea primaria: ausencia de menarca a los 16 años.
- Causas ováricas. Insuficiencia ovárica con gonadotropinas altas
- Anomalías del desarrollo de origen genético u hormonal
- Destrucción de ovarios: tumor, cirugía, irradiación, ovaritis
- Causas hipotalamohipofisarias. Insuficiencia ovárica con disminución de gonadotropinas
- Tumores hipofisarios, enfermedad infiltrativa, anomalías vasculares
- Hipopituitarismo: enanismo hipofisario.
- Mixedema juvenil
- Trastornos funcionales hipotalámicos: pubertad retrasada con amenorrea primaria, caracteres sexuales secundarios poco desarrollados
- Causas uterinas y vaginales. Amenorrea primaria y caracteres sexuales secundarios normales:
- Himen imperforado con hematocolpos, atresia vaginal.
- Síndrome de Rokitansky-Kürster: ausencia congénita de útero con ausencia total de vagina, hipoplasia de las trompas y otras malformaciones: ovarios normales.
- Otras causas: hiperplasia suprarrenal congénita, síndrome de Cushing que aparece en la pubertad, enfermedad fibroquística, insuficiencia renal crónica, cardiopatías congénitas, enfermedades generales graves.
- Amenorrea secundaria: interrupción de la menstruación durante más de 3 meses después de la menarca. Causas más importantes:
- Embarazo: es la causa más frecuente.
- Causas ováricas: insuficiencia ovárica con gonadotropinas altas:
- Destrucción de los ovarios; por tumor, cirugía, irradiación, quimioterapia, ovaritis autoimune.
- Síndrome de Stein-Leventhal u ovarios poliquísticos.
- Menopausia precoz. Sobreviene antes de los 45 años sin causa aparente.
- Síndrome de ovarios resistentes. Se caracteriza por amenorrea secundaria con concentración alta de FSH y LH, y por folículos ováricos normales o degenerados.
- Insuficiencia luteínica.
- Causas hipotalamohipofisarias. Insuficiencia ovárica con disminución de gonadotropinas:
- Hipopituitarismo: síndrome de Sheehan.
- Síndrome de amenorrea-galactorrea.
- Síndrome de Morsier.
- Trastornos funcionales hipotalamohipofisarios; la amenorrea psicógena es la causa más frecuente de amenorrea secundaria.
- Causas suprarrenales. Hiperplasia o tumor virilizante de la suprarrenal.
- Causas uterinas: sinequias postraumáticas (síndrome de Asherman). Amenorrea persistente después de curetaje postaborto o posparto.
- Sinequias inflamatorias. Sobre todo de origen tuberculoso.
- Causas medicamentosas:
- Anticoncepción oral o administración de estroprogestágenos.
- Espironolactona, fenotiazinas.
- Otras causas: desnutrición, anemia grave, enfermedad infecciosas, afecciones crónicas graves, hipotiroidismo.
Menstruación dolorosa o dismenorrea
La aparición de dolor abdominal o pélvico días antes de la menstruación o durante ella, es muy común en la mujer joven. Cerca del 50% de las mismas lo sufren y, aproximadamente, a un 10% de ellas las incapacita para desarrollar su vida cotidiana en esos días.
Los primeros ciclos menstruales no suelen ser dolorosos y conforme van pasando los meses, muchas adolescentes empiezan a conocer las molestias relacionadas con sus reglas que suelen coincidir con el inicio regular de las ovulaciones.
El dolor menstrual crónico, en términos médicos se llama dismenorrea, constituye la causa más frecuente de absentismo en los estudios y en el trabajo de las mujeres jóvenes. El dolor suele iniciarse entre uno y tres días antes de la menstruación, y puede continuar hasta el segundo día de ella.
Las reglas abundantes suelen ser frecuentes en las mujeres con periodos dolorosos. Puede acompañarse de un estado de malestar general con calambres, dolor de piernas, náuseas y vómitos. No es de extrañar que la actitud mental y el estado de ánimo de las mujeres que lo padecen de forma repetitiva, mes a mes, estén alterados. Ninguna mujer debe resignarse a tener menstruaciones dolorosas.
Causas del dolor
En muchas ocasiones no existe una causa orgánica que justifique la presencia de dolor durante el periodo. Inmediatamente antes y durante la menstruación, se produce un exceso de contractilidad del útero debido a que los vasos sanguíneos uterinos liberan unas sustancias, las prostaglandinas, que son las responsables, en muchas ocasiones, del dolor menstrual de tipo cólico (aquel dolor que aumenta y disminuye de intensidad).
Pero no se debe olvidar que existen determinados problemas ginecológicos que pueden causar dolor durante la regla:
- Endometriosis
- Miomas o fibromas uterinos
- Procesos infecciosos de trompas u ovarios
- Los DIUs ( dispositivo intrauterino)
- Deficiencia de magnesio. Este mineral es básico para el músculo uterino y su carencia, problema común en estas edades, puede contribuir a que los periodos sean dolorosos.
Diagnóstico
La historia médica, el examen físico y ginecológico junto con las pruebas complementarias necesarias tales como la citología cervicovaginal y la ecografía ginecológica, podrán ayudar a descartar, en la mayoría de las ocasiones, que no exista algún problema ginecológico que sea el causante de estas reglas dolorosas. En muy pocas ocasiones se tendrá que recurrir a técnicas diagnósticas cruentas, como la laparoscopia o la histeroscopia, para poder conocer el origen de este proceso doloroso.
Tratamiento
Actualmente se dispone de una variedad de medidas terapéuticas, farmacológicas o no, que ayudan, en la mayoría de los casos, a evitar el dolor o a que éste sea menos intenso:
- Los anticonceptivos orales que inhiben la ovulación.
- Fármacos que anulan la producción o la acción de las prostaglandinas.
- Los suplementos de magnesio serán necesarios en aquellos casos en que exista carencia de este mineral.
- El aporte de hierro será necesario en aquellas mujeres con menstruaciones abundantes.
Recomendaciones
- No aceptar el dolor menstrual como normal y acudir a tu ginecólogo/a.
- Practicar ejercicio físico: Las mujeres que regularmente realizan actividad física toleran mejor el dolor de la regla. Asimismo, la práctica del yoga y de ejercicios de relajación durante esos días son eficaces para combatir el dolor.
- Modificar la dieta: Las mujeres que consumen una dieta pobre en grasas saturadas y rica en fibra, frutas y verduras…, tienen menos trastornos hormonales.
- Sabiendo que la ingesta de ácidos grasos esenciales, como el aceite de prímula, de onagra o el aceite de pescado, por sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas, se ha mostrado eficaz en algunos casos de periodos dolorosos.
- Conocer los alimentos ricos en magnesio: todos los vegetales, especialmente los de hoja verde, cereales, legumbres, nueces.